Tregua y amenaza

Llevábamos algunos días de sol en la zona en la que vivo. Una semana, más o menos. Una tregua a este duro invierno que hemos sufrido en Andalucía y al que la mayoría de nuestros hogares y ánimos no están acostumbrados.

Esta mañana se ha roto la tregua: nos hemos encontrado con la calle mojada tras una noche de suaves precipitaciones pero continuas. Y como las naves nodrizas de "V" unos nubarrones se mantienen en el cielo vigilantes, esperando atacar a la primera de cambio.

Pero con la lluvia, la hortensia que tenemos en casa, que ayer parecía un poco mustia, ha resurgido, y sus flores han recogido algunas gotas de lluvia con la idea de posar para la cámara.



Todavía no le cojo el punto a la botánica; cualquier cosa verde que ha pasado por mis manos muere inevitablemente. Ahora tengo la hortensia (que es más bien azul y violeta), que espero que sea la excepción que confirme la regla. También mantengo un rosal, un ficus, un aloe vera que mi amigo Paquito me regaló en estado lamentable (y ahora amenaza con invadir mi casa) y una gardenia con miedo escénico.

Un saludo con fertilizante.

0 comentarios: (Comenta)

Publicar un comentario